Frondella  (3071 metros)
Carlos Sabando Grasa

Alta Ruta de Esquí de Montaña 2010 del Club Peña Guara de Huesca.

(Mismo texto en las tres reseñas, cambian las fotografías y croquis)

Primera jornada: Balneario de Panticosa - Refugio Wallon

Este año el puente de San Jorge permite organizar una Alta ruta de tres días: 23, 24 y 25 de Abril. Por fin ha llegado el momento más esperado de la temporada, y parece que la previsión meteorológica, salvo el primer día, nos acompaña. La cita es a las seis de la mañana en el Coso Real de Huesca, pero yo acudo directamente al Balneario de Panticosa desde Pamplona. Allí nos juntamos pasadas las siete y media y nos preparamos para emprender esta "larga" convivencia.



A las ocho control de ARVA y bajo un cielo gris los 29 privilegiados emprendemos a pie la marcha cargando con los esquís en la mochila. El porteo por el conocido itinerario hacia el Cuello Alto de Brazato se alarga más de lo esperado. En los trillados ascensos a los picos de Bacias y Brazato yo no he tardado nunca tanto en calzar los esquís, pero lo hacemos tras algo menos de una hora, antes de entrar en el barranco de Brazato,. Tras discurrir un tramo placidamente por su confortable fondo nos desviamos hacia la izquierda para remontar las palas que nos llevarán tras muchas vueltas maría y una parada intermedia a situarnos en la preciosa cuenca de los ibones altos de Brazato. Cómodamente pasamos por las distintas cubetas hasta alcanzar el Cuello Alto de Brazato (2580 m), paso bien conocido rumbo al Baciás, pero esta vez no nos desviaremos hacia su cumbre.

En el collado hacemos la segunda parada de la jornada pasadas las once y nos preparamos para un descenso por el barranco de Batanes que no nos aportará grandes sensaciones de esquí, la nieve está muy pesada ya que las nubes que aún nos acompañan han impedido el rehielo nocturno. Se trata pues de llegar sin incidentes al fondo del Valle del Ara, atravesando varios restos de aludes viejos por el camino y sobre todo a base de largas diagonales.

Una vez en el valle (2000 m aprox.) toca colocar de nuevo las pieles de foca y remontar su fondo. Cuando llevamos un trecho recorrido empieza a llover, así que nos pertrechamos para tal inconveniente y continuamos rumbo a un cielo muy negro. La cosa no llega a mayores y la fina lluvia desaparece prácticamente cuando llegamos al circo que cierra el valle. Por el camino vemos caer una colada de fusión, así que nos separamos prudentemente para atacar las palas que nos llevarán desde el fondo del valle al Col d'Arratille. Sin mayores inconvenientes alcanzamos sobre las dos de la tarde este collado (2.530 m), por el que ya atravesamos en sentido contrario en la Alta Ruta del año pasado.

Con poca visibilidad, pero sin lluvia ni viento, se impone una nueva parada en el collado, tras la cual nos preparamos para el segundo descenso de la jornada, mucho más provechoso gracias a su orientación Norte. Alargamos el disfrute forzando al máximo sobre los esquís en el descenso hacia el Refugio Wallon, pero los últimos diez minutos son a pie impepinablemente. La pena es que justo en ese tiempo empieza a llover con ganas y nos tenemos que apiñar en la entrada al refugio (1.865 m) para descalzarnos las botas y acceder al interior antes de las cuatro de la tarde.

Tras invadir de buena manera todos los recodos disponibles para poner a secar todo tipo de materiales nos ubicamos ocupando toda la segunda planta, del mismo modo que el año pasado, y esperamos sin más faena la hora de la cena.

Tras la copiosa cena a base de puré, pasta, estofado, queso y bizcocho, las tertulias preceden a la progresiva retirada a nuestros cómodos aposentos, confiando en que las previsiones meteorológicas acierten y la lluvia de toda la tarde nos deje un buen día mañana.


Segunda jornada: Refugio Wallon - Pico Cambales - Refugio de Respomuso

A las seis se programa el desayuno, más que correcto, con ingredientes a discreción. Una hora más tarde estamos listos para iniciar la marcha bajo un cielo completamente despejado.

Como ya sufrimos ayer, los alrededores del refugio no tienen nieve, así que salimos cargando los esquís en la mochila, a través del bosque y en dirección al valle de los ibones de Cambales.

Tras casi tres cuartos de hora nos calzamos los esquís y nos adentramos en el fondo de la Gave de Cambales, del que saldremos tras remontar unas palas para alcanzar la cuenca de los lagos más meridionales de Cambales o Lacs d'Opale. Aquí hacemos la primera parada del día ya bajo un sol radiante, tras la cual continuamos para enseguida atravesar un gran lago helado.

A continuación remontamos algunas palas más antes de realizar un giro hacia nuestra izquierda (Sur) con intención de abandonar la ruta del collado de Cambales y dirigirnos al collado de Aragón, al sur del Pico Cambales que es nuestro objetivo hoy. Ese giro nos lleva a remontar una pala no muy larga pero de orientación Norte que todavía permanece bastante helada. Tras las típicas dudas unos eligen las cuchillas, otros los crampones y otros simplemente las botas. Yo opto por las cuchillas pero me equivoco y tras subir muy atrancado la mayor parte de la pala decido cambiar de herramienta, pero en la transición mis cuchillas ruedan hasta debajo de la pala... así que toca bajar, pero ni siquiera llego hasta las cuchillas, porque Enrique se me adelanta en el descenso y luego juntos subimos a pie hasta arriba de la pala.

Arriba nos esperan Luis y Pepín, en lo que es la entrada a un bonito valle colgado delimitado al fondo por la Pequeña Facha, la Punta Aragón y el Cambales. El resto del grupo ya enfila a lo lejos la subida al Collado de Aragón, entre estas dos últimas cumbres. Remontamos este valle, bastante tendido inicialmente y posteriormente la pala que nos dejará en el Collado, donde todos nos esperan, sobre las once y media.

Nueva parada y la marcha posterior rodea el Cambales remontando su Cara Suroeste para tras un buen rato alcanzar un punto donde la nieve nos abandona y se impone que nosotros abandonemos los esquís. A partir de aquí toca recorrer a pie el terreno de bloques de granito que nos conduce a la arista cimera, donde un corto tramo un pelín aéreo nos deja sobre las doce y media en la cumbre, a 2.968 metros, donde más o menos cabemos todos y disfrutamos de unas condiciones meteorológicas inmejorables.

Tras unas cuantas fotos desandamos hasta las tablas e iniciamos probablemente el mejor descenso de los tres días, al menos por las condiciones de la nieve. Con pocas paradas nos plantamos en el Port de la Peyre de St. Martin, donde nos alcanza Miguel que viene de la Sarra.

Continuamos descendiendo, pero los vanos intentos de no perder altura acaban finalmente en la zona de Campo Plano, donde se impone poner de nuevo las focas para remontar una corta subida de menos de 100 metros de desnivel, que nos dejará en un pequeño ibón.

Aquí de nuevo quitamos las focas y en suave descenso nos plantamos sobre los esquís en el Refugio de Respomuso (2.125 m) algo más tarde de las dos y media, donde a diferencia de ayer la sesión de secado es al aire libre bajo un sol espléndido.

Larga sentada al sol en la pequeña campa delante del refugio donde a base de cervezas esperamos la hora de la reconfortante ducha con agua caliente (las cinco y media). Tras ello sólo resta esperar la cena a las siete, que todo hay que decirlo nos deja a muchos algo hambrientos, pero a base de pedir extras nos apaciguamos.

De nuevo tertulias y tras arreglar la crisis económica nos retiramos a la cama.


Tercera jornada: Refugio de Respomuso - Pico de la Frondella - Embalse de Arriel Alto - Col du Pallas - Refugio de Arremoulit - Col d'Arrious - Cabaña de Soques

El día empieza con el mismo horario que el anterior, desayuno a las seis (francamente pobre) y tras descubrir unos cuantos chinches en nuestra habitación nos despedimos del refugio de Respomuso una hora más tarde. La previsión de buen tiempo parece equivocada pues el cielo está muy cubierto de momento.

Con los esquís puestos desde el refugio empezamos a remontar el barranco de Respomuso con las Crestas del Diablo de fondo. Tras alcanzar una zona de menor pendiente abandonamos el barranco que se dirige hacia la Vuelta Barrada para enfilar una pala a nuestra izquierda (Este) bastante helada y que acometemos prácticamente todos con cuchillas. Se hace larga y pendiente, pero finalmente suaviza para acabar de bordear el extremo meridional de la Arista Le Bondidier. En este punto hacemos la única parada en este primer ascenso del día cuando son las ocho y el cielo sigue muy negro.

Reanudamos la marcha por terreno y nieve mucho más llevaderos en dirección a la Comba Vallot, siempre con la arista Le Bondidier a nuestra derecha. Una sucesión de palas nos dejan bajo la canal de nieve que alcanza la arista cimera de las Frondellas. A partir de aquí más tarde o más temprano todos tenemos que cargar con los esquís en la mochila y continuar a pie, en mi caso antes de lo necesario y con piolet y crampones. En la transición rápidamente el cielo se despeja y ya tendremos un tiempo excelente el resto del día.

La canal está en buenas condiciones y al menos para cuando llego yo hay huella profunda, incluso demasiado, pero la pendiente es bastante fuerte. Poco a poco vamos remontando y la amplia canal se va estrechando poco a poco y en la parte superior nos cruzamos con dos esquiadores que se atreven a descender por allí.

Así llegamos a un collado en la arista cimera donde todos abandonamos esquís y mochilas y casi todos emprendemos el recorrido de la arista nevada a nuestra derecha (Noreste) en dirección al Pico de la Frondella. Sin pasos aéreos llegamos a una brecha donde un resalte en roca es el paso más destacable. Tres metros de trepada con los crampones puestos y continuamos por nieve hasta el punto culminante de la Alta Ruta, los 3.071 metros de la cima principal de las Frondellas, no son ni las diez y cuarto.

Retorno por el mismo recorrido hasta el collado donde retomar la mochila con los esquís todavía cargados y continuamos por la arista nevada en dirección suroeste hasta pasar por la poco destacada Frondella Central, donde poco más allá iniciamos el descenso por la vía de los lagos de Arriel.

Primero un terreno donde emergen los bloques entre la nieve y después una corta pala franca de poca inclinación. Tras ella la pendiente impone un destrepe cara a la pared pero la nieve es profunda, con lo cual no se complica en exceso. Una corta travesía horizontal y ya llegamos a una pala donde continuar sobre los esquís.

Largo descenso por esta vertiente noroeste de las Frondellas, donde la temprana hora, sobre las once y cuarto, hace que encontremos nieve bastante dura en la parte superior pero se puede disfrutar. En la parte inferior del descenso la nieve ya no está nada bien y los restos de aludes tampoco ayudan, pero tras pasar por el Ibón Chelau alcanzamos el embalse de Arriel Alto (2.260 m) con el único percance del encontronazo de un esquí de Tere con una piedra, que hará que se encamine con Miguel directamente a La Sarra.

El resto colocamos focas en el horno que es a mediodía este agujero del embalse de Arriel y ya con menos ganas emprendemos la subida hasta el Col du Palas (2.500 m), donde sudaremos de lo lindo. En el collado por fin una parada en condiciones cuando es casi la una de la tarde.

Tras comer algo quitamos focas y descenso hasta el refugio de Arremoulit. Continuamos el descenso pero sin llegar a alcanzar el Lac d'Artouste de nuevo a poner las focas para el último ascenso de esta Alta Ruta hacia el Col d'Arrious. Mentalmente desde abajo se hace más duro de lo que realmente resulta, así que en menos de lo que esperamos nos plantamos en el collado antes de las dos y media.

Parada no muy larga pues nos falta agua a muchos de nosotros, así que quitamos focas y para abajo por alguna pala todavía interesante hasta alcanzar un tramo en que el riachuelo ya queda al aire y podemos recargar. Continuación hasta la última lengua de nieve esquiable en este barranco de Arrious, y aquí mientras volvemos a cargar con los esquís en las mochilas ya nos felicitamos por el éxito de la travesía.

A pesar de tener que continuar a pie el descenso es bonito, tras alejarse del barranco se adentra en el bosque y por buen camino nos deja finalmente en la cabaña de Soques, ya en la carretera del Portalet, donde llegamos antes de las cuatro de la tarde.

En unos minutos aparecen nuestros taxis, que nos llevarán a los conductores a recuperar los coches al Balneario de Panticosa, para luego retornar con ellos a la cabaña de Soques, donde recoger personas y materiales. Aquí acordamos acabar la jornada comiendo juntos (costumbre bien arraigada este año) en Escuer para cerrar la temporada 2010.


Track jornada 1 en Wikiloc
Track jornada 2 en Wikiloc
Track jornada 3 en Wikiloc (incompleto por falta de batería)

Álbumes de fotos en Picasa:
Jornada 1
Jornada 2
Jornada 3

Jornada 3: