Pico Palas  (2974 metros)
Itinerario: La Sarra, Ibones de Arriel, Chimenea Ledormeur, Pico Palas
Desnivel: 1534 (1562 acumulado)
Tiempo: 4:30 subida y 3:45 bajada (sin contar paradas). Total: 8:15.

Se sale del embalse de La Sarra (1440m), al que se accede desde Sallent, por una pista asfaltada que se coje a poco de entrar en el pueblo, a la izda.
Desde el embalse de La Sarra se va ascendiendo muy poco a poco, en dirección N, siguiendo la indicaciones hacia el refugio y embalse de Respumoso. Se va por el GR 11, con sus características marcas rojas y blancas. Se atraviesan bonitos bosques de pinos y luego de hayas, manteniendo el torrente de aguas limpias siempre a nuestra dcha.




Se pasa de largo por la indicación del desvío al pico Arriel (0h:40m, 1625m), y tras pasar el Llano Cheto y en plena subida hacia el paso del Pino, aparece el desvío a la izda hacia los ibones de Arriel (1h, 1760m).




El camino ahora asciende claramente y al poco sale del bosque.
Vamos ahora , por terreno mixto de pedriza con manchas de brezo, rododendros y boj. Al llegar junto a una agradable cascada, cruzamos un torrente, y lo dejamos a nuestra dcha. La senda está bien marcada con hitos y pintura roja.




Al poco llegamos al primero de los ibones inferiores (1h:20m, 1881m). Nada más sobrepasarlo, la senda se bifurca, un ramal, el que debemos tomar, sigue en la dirección que llevamos: N, y el otro, muy arreglado, casi una pista, se dirige al SE, hacia el refugio de Respumoso.
Al fondo, allá arriba, ya puede verse el magnífico Balaitús.




Tras el primero de los ibones inferiores se llega en 5 minutos al segundo, y ya podemos distinguir la inmensa mole del Palas reflejándose en las aguas del ibón.




Nueva bifurcación: a la dcha, hacia el E, la senda sube hacia los Frondellas, nosotros seguiremos por la izda, hacia el N, cruzando un arrollo. Rodeamos el ibón Arriel Superior dejándolo a la izda, por una zona de caos de enormes rocas, que sin duda debía de ser la morrena de un antiguo glaciar.
Cuando ya casi hemos sobrepasado el ibón, nos surge la duda de por donde seguir. Debemos acabar de bordear el ibón dejándolo a la izda, y nos encontraremos con un el comienzo de una senda que se va dibujando a duras penas por la pedriza, marcada de tanto en tanto por hitos. Al cruzar un torrente que nos viene del E, sale un desvío que asciendo con el torrente: lo evitamos.
Nosotros debemos dirigirnos hacia el collado de Lavedán, al NNE. Para ello remontamos la pedriza dirigiendonos en primer lugar a una canal que hay a la dcha de un corte muy evidente producido por un torrente en las rocas que hay a nuestro frente. La incómoda y resbaladiza canal nos deja ya en las mismas faldas del Palas (2447m).




Para atacar la enorme mole del Palas, debemos localizar los hitos que marcan el inicio de la subida. Se encuentran casi a la misma altura que el collado Lavedán, exactamente a 2.634m, a unos 200 m a la izda del mismo (3h:40m). Es justo en la línea se separación entre la pedriza y las llamativas rocas claras que conforman la base de la pirámide del Palas.




El camino comienza dirigiendose a la derecha, por roca clara de granito sobre la que amenudo hay que apoyar las manos.




Al poco gira 90º a la izda y nos deja en la base de la chimenea Ledormeur. No hay que confundirse con una chimenea que parte ya desde la misma base, un poco a la izda del camino correcto, en la foto se ve bien, creo.

Pongo otra foto, esta vez tomada desde la gran diagonal del Balaitús. Se distingue la pedrera por la que se sube, las rocas claras de la base de la montaña y las tres chimeneas que hay entre el Pitón Von Martin y la cima del Palas. La que ahora nos interesa, la de Ledormeur, es la tercera, las dos primeras las he marcado con una "X".





El primer tramo de la chimenea, unos 30 metros, son los más verticales, hay que ayudarse de las manos para trepar, algún paso de II grado, pero incluso resulta entretenido: no faltan buenas presas por todos lados y el granito es firme y da confianza. Aquellos que no sufren vértigo y tienen una mínima coordinación, no deberían tener problemas aquí. Al final de este primer tramo hay montado un tinglado de rapel con un par de clavos y una cinta. Aunque no se yo si me fiaría, los clavos están oxidados, a saber cuanto tiempo llevan ahí.

En la foto se ve la chimenea de Ledormeur casi completa, desde su inicio




Un detalle de la chimenea




Superado este primer tramo, el resto es mucho más fácil y se llega al final de la chimenea, sin más problemas, en pocos minutos.
A partir de aqui, los hitos nos ván indicando el camino a seguir, y nos dirigen hacia una canal algo descompuesta que se intuye allí arriba y a la que se llega cómodamente.




Superada esa canal, se accede ya a la cima por una placa tumbada de granito que se pasa bien prácticamente sin apoyar las manos (4h:30m, 2974m).
La cima está coronada por un gran montón de piedras. Las vistas son extasiantes, pero destaca sobre todo la inmensidad del Balaitus, por su cercanía, nos muestra su cara norte, con la esbelta y elegante Gran Diagonal.


Panorámica desde la cima





La bajada por el mismo sitio

Observaciones: Ascensión muy, muy recomendable, a pesar de lo larga que es y del desnivel que se supera. Es superentretenida y muy variada, pero exige estar en buena forma física.
Recordar que si vamos con gente inexperta podríamos asegurarles con una cuerda la bajada del tramo más vertical de la chimenea .
Por cierto, si tenemos casco, es un buen sitio para llevarlo y usarlo: se sueltan piedras con facilidad, y con esa verticalidad se convierten en bólidos.