Ferrata Pico Tres Mares  
Pues la cosa es que yo estaba con los pies metidos en el Cantábrico tan a gusto, pero tendría que volver a casa en algún momento. Vuelvo a la Escaramujo y comienzo sin muchas ganas el viaje de vuelta a Madrid.
Entonces vi una señal indicadora, "Nacimiento del Ebro" para que más, una buena razón para salir de la autovía. Pero después de la visita localizo en un mapa zonal, que estoy a muy pocos kilómetros del Pico Tres Mares. ¡La leche!, un hito de las cuencas españolas, vamos EL HITO y no había estado. Un repaso al mapa del panel informativo y veo que hay una posibilidad de carretera que llega muy cerca de la cumbre. Pues ya está decidido, intentaré el Tres Mares.
Pero ya estaba oscuro cuando iba subiendo hacia las pistas del Alto Campoo. En Brañavieja continué hacia los aparcamientos de la estación de esquí. Apenas podía intuir las cumbres cercanas, no tenía ni idea de cual sería mi objetivo, solo podía imaginarlo, lo que si vi fue unas luces que descendían desde bastante más alto. Volví sobre mis pasos hasta Brañavieja y tomé la carretera que ascendía, entonces vi un albergue y decidí entrar en busca de información. Había cierta algarabía de chavales en la planta superior y una cocinera enfrascada en preparar su cena. Pero en el hall también había un plano en perpectiva de la estación de esquí, de las dos siluetas que había podido atisbar, el Tres Mares era la cumbre de la derecha. Cogí un folleto y volví a salir, entonces un paisano que paseaba con su perro, salió de la oscuridad bajando por la carretera; le pregunté y fue un caudal de información. Que cosas, justo la última persona que vi.

Dormí en la Escaramujo y madrugué para cazar la salida del sol desde la cumbre. Por la noche no había visto que la continuación era realmente una pista de esquí, como me había dicho el paisano y fue como un paseo. Ya en lo alto me sorprendió lo bien definidas que aparecen las vertientes que separa esta cumbre de 2171 m. Con la salida del sol el paisaje iba tomando forma y colores, sequé varias fotos, un video circular y hasta me comí algunos orejones que habían dejado en su bolsa entre la estructura de la cumbre, y entonces lo vi, una cuerda y a su lado un cable anclado al estilo ferratero a la roca, me acerqué a investigar y apareció la línea de grapas, bajé ayudado de la cuerda y descendí un par de grapas. El ver que desaparecían más allá de la vertical no me animó a intentar bajar más, pero en la Escaramujo tenía los archiperres ferrateros y un día para disfrutarlo a mi aire.

Cuando ya bajaba por la pista me alcanzó un 4X4 de mantenimiento y me dijo que no había problema en que subiera con mi furgo. Total que después de desayunar regresé, esta vez motorizado, hasta el punto en que estaban trabajando con una máquina.

Pertrechado con el equipamiento empecé el descenso de la ferrata, que tenía que ser bastante actual por las buenas condiciones en que la encontré. Puesto que no había visto ninguna indicación de su existencia, pensé que sería la forma de acceder desde la vertiente del Atlántico. En la base volvían a emparejarse la cuerda y el cable con tres largos tramos, por un terreno de ladera, peo muy empinado. Lo que me sorprendió fue el no encontrar algún tipo de senda. De forma bastante precaria alcancé un punto que me permitía ver algo más allá, pero continuaba sin atisbar senda alguna. Posteriormente me acerqué al Peña Labra y me asomé a la cresta buscando esa posible vía de entrada, pero no vi nada. De la cresta hacia el Cuchillón no puedo decir algo diferente.

Los trabajadores de la estación sabían de su existencia, los montañeros locales uno de cuatro y en internet lo primero que encontré fue una protesta por la existencia de esta ferrata anónima, pero nadie que la hubiera hecho. Extraña situación que requirió del descenso antes de poder afrontarla desde abajo.

Para mi llegar a la cumbre había sido un paseo, viendo el paisaje desolado de una estación de esquí sin nieve, la vertiente mediterránea no parecía la más alpina, pero llegar a la cumbre sin pasar por los terrenos de la estación, no parecía nada sencillo, tal vez esta ferrata quiere alcanzar el Pico Tres Mares sin tocar la estación, no lo se. Recuerdo otra cumbre puntera con su ferrata de categoría, la Teresina al punto culminante de la Sierra de Montserrat.

El no encontrar información me hace dudar, ¿aguantará en el tiempo esta instalación? Descender un techo de una ferrata requiere su maña, pero me parece más seguro que cruzar la ladera, con peligro de escurrirse en la hierba y un posible despeñe .

CONCLUSIÓN
Informo de su existencia, pero solo se la recomiendo a los viciosos de las ferratas. Es una actividad que recuerda a la entrada a una sima, primero se desciende y luego se sube para salir.

Por supuesto estoy dispuesto a revisar esta descripción, si me llega información que amplíe la que yo proporciono.

COMO LLEGAR
En la estación de esquí de Alto Campoo y alcanzar la cumbre del Pico Tres Mares.