Mallo Pisón  
MALLO PISÓN, VÍA PANY-HAUS. Cuando despues de un verano de trabajo y escalada en el Circo de Gredos en 1984, salimos hacia el norte de Aragón y Cataluña, mi compañero y amigo Miguel Angel y yo, buscando grandes paredes para escalar y llegamos a Riglos de noche ; subimos con la furgo hasta una pradera en la base del Mallo Pisón y montamos el vivac. Las primeras luces me despertaron dentro del saco, podía ver algo más allá de mis cejas, estirando el cuello hacia atrás, me quedé sin respiración al ver una imponente masa de roca inclinandose sobre mí amenazadoramente.

Despues del susto-sorpresa de ver por primera vez el Mallo Pisón con sus 300 m. de altura, lo escalamos y tambien el Mallo Fire, estaba muy en forma, pero desde entonces he vuelto en varias ocasiones para disfrutar de estas maravillosas paredes.

COMO LLEGAR: Los Mallos de Riglos, dominan el pueblo del mismo nombre que está en la provincia de Huesca, desde la capital se sale por la A-132, pasado el pueblo de Ayerbe encontraremos el desvío a Riglos y los Mallos. Hay un aparcamiento para autobuses antes de entrar al pueblo y otros dos para vehículos menores a la derecha un poco más arriba. Llevaremos un rato viendo los Mallos.

VÍA PANY-HAUS: Si miramos el Pisón desde el pueblo, se aprecia una profunda fisura que enmarca la pared por la derecha, por esa chimenea transcurre la Pany-Haus. Para alcanzar el torreón de la cumbre, los últimos 80 m. siguen la ruta normal. La primera vez que se alcanzó esta cumbre de 945 m, fue rapelando hasta el collado desde las cumbres posteriores. La vía en cuestión fue abierta el 28/06/1946 por Jordi Casasayas Reichardt "Haus" y Jordi Panyella Renom "Pany".
El primer largo no llega a meterse en la chimenea para que corran las cuerdas, y en una de las panzas hay que apretar. Luego nos metemos en la gran fisura y las cosas se encarrilan. Si alcanzamos, emplearemos los dos planos; si no, se progresa por una de las paredes, los tramos anchos y estrechos se suceden, los dos planos ayudan en los pasos extraplomados, porque la vía es vertical. Nosotros no nos lo pensamos a la hora de recurrir al A0, (agarrarse a las cintas) sobre todo en un techo con cuatro cintajos puestos (VIº en libre). Pero menos en 5 ó 6 casos subí limpiamente y toda de primero, dado que mi compañero era la primera tapia de ese calibre que se metía para el cuerpo y por la tranquilidad de la cordada lo decidimos así.
Al final de la chimenea tube que montar reunión en un árbol con cintas largas, y así poder controlar al segundo, unos metros por fuera está la instalación de rápel, pero no se puede hablar con el compañero.
Por un tramo sencillo se llega al collado donde se une el Pisón al resto del macizo.
El torreón final se empieza con una tendencia hacia la izq. que con buena gestualidad no es complicado y luego ir buscando los pasos más obvios en un zizagueo. Aconsejo hacerlo en tres tiradas para que las cuerdas corran.
Un sendero nos lleva a la cumbre y al paso veremos un cable que es la línea para llegar al primer rápel.
Con dos cuerdas de 50m. se puede bajar por el anfiteatro, pero hay un volado de 40 m. Nosotros, con una sola cuerda de 60 bajamos por la misma ruta de ascenso equipada con argollas dobles rojas, de todas formas al entrar en la chimenea tubimos que montar un rápel desde una savina, no encontré los anclajes. Los demás rápeles fueron del tirón.